Cría en cautividad de Cicindela campestris

Desde el día 8/03/2014 tengo una pareja de C. campestris en un pequeño terrario.

Como iluminación se está usando una lámpara LED y parte de un cable térmico situado a media altura por fuera del terrario, que eleva la temperatura local a unos 24 ºC.

La hembra, siendo bastante más grande que el macho, lo persigue y acosa bastante durante los primeros dos días, pero una vez bien alimentada con un gusano de la harina al día se muestra menos agresiva. El macho se conforma con los restos del gusano dejados atrás por la hembra. Esta mañana ya he observado una cópula sosegada (en días previos hubo intentos por parte del macho que quedaron en nada) (Fig 1). Manteniendo una porción del suelo, compuesto por una mezcla de tierra arcillosa del lugar de origen y de arena, húmeda espero conseguir algunos huevos de esta especie.


Fig 1: Después de varios días de tentativas, la hembra acepta los avances del macho. Posiblemente, dado lo temprano de la fecha de captura, todavía no fuera madura hasta este momento, y por tanto no se mostraba receptiva. 13/03/2014

Antes de alimentar con gusanos de la harina lo hice con Drosophila, y un gran número de los ataques de las cicindelas son evadidos por las moscas, que además trepan por las paredes y se mantienen fuera del alcance de los escarabajos. Por eso veo bastante más factible alimentar sólo con gusanos de la harina y complementar con insectos pequeños recogidos en la calle. (Fig 2)


Fig 2: Macho alimentándose con una larva de Tenebrio molitor. La larva ya había sido reducida y consumida por parte de la hembra, y ahora el macho aprovecha los restos que aún quedan.


Les gusta dormir juntos en un hueco del tronco que hay en el terrario, y no enterradas debajo de él como he venido observando hasta ahora en otras especies.


Fig 3: La hembra tantea el suelo de la zona seca y hasta hace pequeñas muescas en él con su ovopositor, en presencia del macho. Esta acción, aislada, no llevó a nada. 13/03/2014

Al cabo de tres semanas bajo estas mismas condiciones, con las que se han producido numerosas cópulas y algunos tanteos del suelo con el ovipositor por parte de la hembra (Fig 3), por fin ha empezado a poner huevos (29/03/2014) (Fig 4, Fig 5). Es importante notar que los animales fueron alimentados ad libitum, y que la hembra ha comido bastante más que el macho y también ha pasado más tiempo de inactividad durante el día debajo del tronco.


Fig 4: Arriba a la derecha se puede apreciar el hueco donde la hembra ha puesto ya un huevo, mientras ella misma coloca el siguiente (nótese la arena removida a espaldas de la hembra, que se encuentra en este momento introduciendo el aparato de ovoposición en la tierra).



Fig 5: Visión más cercana de la hembra en la imagen anterior. Pone el huevo justo en el borde de la zona húmeda del terrario.

La hembra parece muy cuidadosa con el lugar donde hace la puesta, y hace un pequeño agujero con el aparato de ovoposición antes de colocar un huevo en el fondo del mismo. Durante este tiempo la hembra ya no se muestra receptiva a los avances del macho, y cualquier intento de cubrición por parte del mismo se disuelve rápidamente ante la negativa de la hembra, aunque ya al día siguiente vuelve a recibir al macho.

Última actualización: 29/03/2014